En todas las aldeas, comunidades, municipios y departamentos de Honduras existen personajes que son muy diferente a los demás de la población, por su manera de ser, caminar, hablar y muchas veces por sus acciones que entretienen a los vecinos de un pueblo.

Gualala es un pintoresco municipio del departamento de Santa Barbara, su poca población se dedica a la agricultura, ganadería, caficultura y la elaboración de algunas artesanías como el sombrero de palma. Las mujeres amas de casa y hacer el famoso pan de mujer.
En este pintoresco pueblo del occidente de Honduras nació Osman Sabillón en el año 1938 hijo de Maximiliano Sabillón y Patrocinia Fernández Pineda ambos vecinos de este municipio dedicados a la ganadería y agricultura.
Osman Sabillón creció en este pueblo donde curso hasta el quinto grado luego por ser hijo de padres ganaderos se capacito en veterinaria y se dedicó por muchos años a la crianza de ganado y cultivo de maíz en pocas cantidades lo cual le servía para alimento de la familia y algunas veces para el ganado.
Casado con María Clara Sabillón y padres de seis hijos, tres hembras y tres varones sigue viviendo en este pueblo y a menudo se le ve por las calles conversando con los vecinos y haciendo reír a muchas personas con sus ocurrencias.
Osman Sabillón es muy reconocido por las palabras que utiliza como ser. Mayolo, yuyo que es una palabra muy utilizada en San José de Colinas municipio vecino, soropeto, trolero, gran caballo y otros pocos comunes en nuestro lenguaje.
Además, Osman se caracterizó porque a todo el ganado de su padre le ponía nombre en cuanto nacía, entre los nombres que recuerda están moyola, canela, cuatro ojos, los siete hilos, la barcina, la avioneta, morena y muchos nombres más que son muy recordados por la población igual que el nombre que hizo muy famoso a su caballo llamado Goascoran.
Goascoran era su caballo preferido a pesar de tener muchos caballos y yeguas era el que mas utilizaba para montar, el cual a la hora de la entrevista recordó con mucha nostalgia, lo describió como un caballo amigo fiel, de color rojo y manchas blancas en su cuerpo.
Hoy en día Osman Sabillón cuenta con 81 años de edad, pero sigue caminando por las calles del lugar que nació como siempre con sus ocurrencias y contando chistes, los años han pasado pero el sigue con el mismo entusiasmo y utilizando las mismas palabras que lo han hecho muy famoso en este municipio.
Con mucha risa nos contó que disfruta mucho bailar y que también le gusta cuando la gente del pueblo le hace rueda y lo aplaude cuando lo hace, además de ir a bañar al río Ulúa en tiempos de verano.
